Cualquiera que fuere la desgracia que le ocurriera a un musulmán: cansancio, enfermedad, tristeza, daño, pena, dolor o incluso una espina que se le clavara, servirá para que Al-láh le expíe sus faltas. A todo siervo que atestigüe que no hay más dios que Al-láh y que Muhámmad es Su siervo y Mensajero, sinceramente desde su corazón, Al-láh lo apartará del Fuego del Infierno. Pues el derecho de Al-láh sobre sus siervos es que le adoren y no le asocien nada ni nadie. Y el derecho de los siervos sobre Al-láh es el de no ser castigado quien no le asocie nada ni nadie Quien muere sin asociar nada a Al-láh entrará en el paraíso, y quien muere asociando a algo con Al-láh entrará en el infierno Ciertamente Al-láh distinguirá a un hombre de mi Ummah ante toda la creación en el Día del Juicio No transformen mi tumba un lugar de celebración, ni vuestras casas en tumbas, sino suplicad por mi para la bendición y la paz de Al-lah. Esta súplica que hacen por mí me alcanza siempre donde quiera que estén. ¡Cuánto me gustaría tener tanto como esta montaña en oro y que no pasaran tres días sin haberlo dado todo excepto un dinar que guardaría por si hubiera contraído alguna deuda! Lo repartiría entre los siervos de Al-lah a mi derecha, a mi izquierda y detrás de mí. Oh mensajero de Al-láh, no he dejado ningún pecado mayor ni menor sin cometer, dijo el profeta: "¿Acaso atestiguas que no hay divinidad digna de ser adorada fuera de Al-láh y que Muhámmad es mensajero de Al-láh? Las acciones son de seis tipos y las personas son de cuatro. Dos acciones imperativas, una por otra, una buena acción por diez de recompensa, y una buena acción por setecientas de recompensa Di 'no hay más divinidad digna de ser adorada fuera de Al-láh', y testificaré por ti en el Día del Juicio